Para efectuar una compresión directa hay que seguir los siguientes pasos:
Sepa que el primer gran paso para el control de la hemorragia lo realiza el propio cuerpo con los sistemas de coagulación sanguínea.
· Efectuar presión en el punto sangrante. Para ello utilizar un apósito lo más limpio posible (grasas, pañuelo…).
· Si es preciso, colocar otro opositor sobre primero. Hágalo sin quitar este, ya que arrastra enviamos el coágulo que se está formando.
· Sin hemorragia es en una extremidad es preciso efectuar la presión durante un tiempo mínimo de 10 minutos de reloj; se puede elevar la extremidad a una
altura que supere la del corazón del accidentado, siempre que no se hayan detectado traumatismo en la extremidad afectada, pero no se han demostrado
que esto aporte más beneficios que utilidad sólo la compresión. La sola movilización de la extremidad puede retardar la correcta coagulación, por lo que es
mejor que se insista en la compresión directa.
· Pasado este tiempo se aliviará la presión, pero nunca se retirará el primer apósito.
· En caso de que se haya detenido la hemorragia, se procederá a cubrir la herida, y se trasladará al accidentado a un centro sanitario.
· En caso de fractura abierta u objeto clavado, el primer actuante debe ejercer una presión suave sobre la hemorragia sin presionar directamente sobre el
hueso u objeto clavado.
. Recuerde que la compresión directa es la técnica más efectiva para el control de la hemorragia, no intente comprimir en otras zonas (compresión indirecta)
ni realice otras técnicas sin indicación médica, no aportará más beneficio
Sepa que el primer gran paso para el control de la hemorragia lo realiza el propio cuerpo con los sistemas de coagulación sanguínea.
· Efectuar presión en el punto sangrante. Para ello utilizar un apósito lo más limpio posible (grasas, pañuelo…).
· Si es preciso, colocar otro opositor sobre primero. Hágalo sin quitar este, ya que arrastra enviamos el coágulo que se está formando.
· Sin hemorragia es en una extremidad es preciso efectuar la presión durante un tiempo mínimo de 10 minutos de reloj; se puede elevar la extremidad a una
altura que supere la del corazón del accidentado, siempre que no se hayan detectado traumatismo en la extremidad afectada, pero no se han demostrado
que esto aporte más beneficios que utilidad sólo la compresión. La sola movilización de la extremidad puede retardar la correcta coagulación, por lo que es
mejor que se insista en la compresión directa.
· Pasado este tiempo se aliviará la presión, pero nunca se retirará el primer apósito.
· En caso de que se haya detenido la hemorragia, se procederá a cubrir la herida, y se trasladará al accidentado a un centro sanitario.
· En caso de fractura abierta u objeto clavado, el primer actuante debe ejercer una presión suave sobre la hemorragia sin presionar directamente sobre el
hueso u objeto clavado.
. Recuerde que la compresión directa es la técnica más efectiva para el control de la hemorragia, no intente comprimir en otras zonas (compresión indirecta)
ni realice otras técnicas sin indicación médica, no aportará más beneficio